domingo, 5 de junio de 2011

LA SEJUELA

Al parecer, más que las arrugas, la calvicie o la barriga son ciertas actitudes las que delatan a quienes están en la antesala de la tercera edad.

Le llego ya la "Sejuela"?

Si se tiene que bañar con agua tibia y solo toma café con leche en las noches, si tomar cerveza lo manda -ipsofacto- al pipiroom, si se ahoga en un vaso de masato y usa camiseta debajo de la camisa y buzo cuando llovizna es que le llego la sejuela antesala anunciada de la ya comentada tercera edad.

Si le da catarro con solo abrir la nevera, si ya no le salen los silbidos, si le cuesta trabajo arrancar en subida, le da vértigo subirse a un banco para cambiar un bombillo, usa pantaloncillos para madurar aguacates e insiste en que las medias de rombos están de moda, sejuela hermano, pura sejuela.

Si el picante lo irrita, la carne le da gota, el cerdo lo brota y la sal lo agota, si tomar agua lo pone cístico, el dulce le sube la bilis, el tomate le produce agrieras, el huevo le dispara el colesterol, y el pimentón lo eructa, no es más que la sejuela que entro en su vida.

Si amarrarse los zapatos le da lumbago, levantar una silla lo hernia, si la limonada le alborota las amebas, un pandebono le recuerda su hernia hiatal y una cincuentona todavía le parece un "lapo d'hembra", la sejuela ya está haciendo de las suyas.

Si en lugar de clavarse en la piscina se mete al agua por las gradas pasito a pasito, Si tiene más de dos pares de anteojos, Si luce dientes de varios colores, dejó de luchar contra los callos y los pelos de la nariz lo hacen estornudar cuando se los arranca, no hay duda: la sejuela lo tiene vaciado.

Si el kumis le suelta el estómago, tiene una lupita clandestina para leer los clasificados, carga más de cuatro llaves en un llavero, la úlcera se le encabrita al primer aguardiente, se está jorobando poco a poco y orina sentado cuando esta enguayabado, está usted "sejuelado".

Si le tiene pánico a una caída, se pone zapatos blancos y cachuchita de capitán los domingos y festivos, si enclochar le produce calambres, si oye poco, ve poco, toma poco y come poco, la sejuela lo está comenzando a matar.

Si ya se cree contemporáneo de su suegro, su pelo que no se le cae se le vuelve ya no cano sino amarillo, si no come zapotes por no untarse y las hebras del mango le desajustan el puente, si le gustan las reclinomáticas y tiene billetera con monedero, si no es sejuela, que otra cosa puede ser?

Si el televisor lo arrulla y un tinto lo pone a mil. Si le tienen que llenar los cheques y anda con un botiquín entre el bolsillo, si duda de todo y no cree en nadie, si llama más de lo que lo llaman, si la misa de gallo le parece tardísimo y ya no se pueden ver ciertas cosas que le son inciertas, q.e.p.d. amigo, la sejuela como que se lo llevo.

Otros síntomas de la sejuela:

- Llorar con las películas de dibujos animados.

- Pelear por un lado de la cama.

- Pedirle al mesero de la discoteca que le de la mesa lejos de los parlantes.

- No quitarse la camisa de la pijama para hacer el amor.

- Si el odontólogo ya le hablo de periodoncia.

- Cree que siempre tiene la razón.

- No ser capaz de dormir hasta tarde.

- No hacer el amor después de comer porque se indigesta.

- Cuando por segunda vez no puede hacer lo que antes hacía por primera vez.

- Empezar a mentir acerca de la edad.

- Cambiar la tanga por interiores de franela.

- Pasar a la categoría de convertible: descapotado, llanta ancha y palanca al piso.

- Empezar a decir que la vejez no está en la cédula sino en la mente.

- Salir de cine con el pañuelo en la boca.

- Empezar a pensar que todo tiempo pasado fue mejor.

- Añorar que llegue el sábado pero para descansar.

- Cuando se demora toda la noche para poder hacer lo que antes hacia toda la noche.

- Despertarse a las cinco de la mañana.

- Huirle al chiflón.

- Empezar a pedir que le bajen el volumen al equipo de sonido.

- Si un agua aromática le produce insomnio.

- Usar pantuflas.

- Llegar a la edad de los metales: cabello de plata, diente de oro y pájaro de plomo.

- Cuando la neuralgia dura más de una mañana.

- Empezar a peinarse cuidando de cubrir los claritos.

- Confundir el martes con el lunes porque esta lluvioso.

- Decir color carmelito, en lugar de café.

- Cuando todo le parece o muy lejos o muy caro o muy tarde.

- Hacer el amor casi todos los días: casi el lunes, casi el martes..., casi....